30 años después

Solo, esperando tu llegada en el hogar que hemos construido desde hace 30 años, en esta casa que compartimos desde hace más de 20 años, viendo a mi alrededor, siento esa sensación de intenso agradecimiento, me salvaste la vida, me has tenido paciencia, me has llenado de amor, me regalaste dos hijos y claro también lo material que hemos construido, pero hoy, con el país tan hecho mierda como lo tenemos, siendo que ha valido la pena vivir, se que vale la pena seguir con vida y con esperanza de que aun podemos cambiarlo.

Has sido mi salvación desde los 25 años ¿Porqué perder la fe y esperanza hoy 30 años después?

Sin duda, a pesar de los errores y el cansancio que alguna vez habré tenido, la tranquilidad que me da este hogar, la seguridad y el respeto que en él siento no lo encontraré en ningún otro lado.

Sin duda, he encontrado mi puerto, puedo morir en paz, pero,

Sin duda, mientras la muerte llega, podré seguir disfrutando esa sensación de sentirme querido y poderte decir: Negrita te amo.